El Día del Animal en la Argentina se conmemora cada 29 de abril con el fin de celebrar a todas las especies del país y prevenir la extinción de muchas de estas. La fecha recuerda el fallecimiento de Ignacio Lucas Albarracín, uno de los pioneros en la lucha por los derechos de los animales del país, que ayudó a impulsar leyes y concientizar a las personas acerca del maltrato y explotación que padecen a diario. «Se conmemora el Día del Animal en Argentina por el fallecimiento de un abogado llamado Ignacio Albarracín que luchaba por el derecho de los animales. Si bien está la Ley de Maltrato Animal vigente, falta mucho por hacer todavía a nivel local y nacional. Cotidianamente, me llegan muchos casos de maltrato porque trabajo junto a Perritos Callejeros. Tenemos maltrato o falta de dedicación completa a la mascota. Cada vez que se lleva un cachorro a las casas, se explica la importancia y la responsabilidad de tener un animal», comentó la Médica Veterinaria, Camila Insaurralde, en LA MAÑANA DE LA RADIO.
«Nos tocó muchas veces que dimos en adopción y nos devuelven en mal estado. Desde que yo trabajo y hablando con gente mayor, antes el perro era para estar afuera de la casa y eso cambió muchísimo. Ahora por ejemplo, ya lo llevan a la peluquería o a vacunarse de seguido y en ese sentido cambió mucho. Siempre hay que hacer refuerzos en el año, toda su vida; siempre lo recomendable es hasta que no termine su plan de vacunación, que no socialice con otros perros», resaltó.
¿QUIÉN FUE IGNACIO ALBARRACÍN?
Ignacio Lucas Albarracín nació el 31 de julio de 1850 en Córdoba y se recibió de abogado en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Buenos Aires, en 1873. Formó parte del equipo de trabajo de Domingo Faustino Sarmiento, luego de su mandato presidencial. A pesar de trabajar en su propio estudio jurídico, deseaba encontrar su verdadera misión en la vida.
Comenzó participar en campañas políticas por la lucha de los derechos de los seres vivos, hasta que fue nombrado Secretario de la Sociedad Argentina Protectora de los Animales (SAPA), fundada en 1879 y en 1885 presidió esta misma. Una de sus tareas más relevantes fueron las acciones para terminar con las riñas de gallos, las corridas de toros y el tiro a la paloma. Como muchos de sus colegas, era vegetariano e impulsaba este estilo de alimentación. Asimismo, comenzó a cuestionar las tareas llevadas a cabo en zoológicos y se pronunció en contra de los espectáculos de animales, que tomaban lugar mayormente en los circos.
El 25 de julio de 1891 impulsó la Ley Nacional de Protección de Animales (N.º 2786), conocida como Ley Sarmiento. Esto significó un hecho trascendental en el mundo, ya que muchos organismos internacionales como la ONU y diferentes países la tomaron como ejemplo para su lucha contra el maltrato animal.