El Comandante de Bomberos Voluntarios de Bella Vista, Hugo Leguizamón, brindó detalles en RADIO BELLA VISTA sobre el arduo trabajo que su equipo tuvo que realizar este lunes para combatir un incendio en el campo de la familia Achitte. El comandante destacó las dificultades y el cansancio del equipo, quienes estuvieron trabajando hasta la madrugada para controlar el fuego.
«Cada salida cuesta mucho dinero, tanto por el agua como por el combustible», explicó Leguizamón, haciendo hincapié en el esfuerzo económico que implica cada intervención. «Cuando llegamos, no puedo mandarle al equipo a sus casas sin comer. Entre que juntamos todo, se hicieron las 01:00 de la madrugada. Fueron muchas horas de trabajo y agotamiento», agregó.
El incendio fue particularmente complicado debido a la cantidad de tacuaras presentes en la zona, las cuales, según el comandante, «son difíciles de apagar porque tienen mucha suciedad en la raíz». Tres dotaciones de bomberos fueron necesarias para combatir el fuego, pero a pesar de los esfuerzos, el fuego se avivaba rápidamente en distintas partes del campo.
Leguizamón también denunció que el incendio fue intencional: «En la parte que se le quemó al señor Achitte, alguien entró y le prendió fuego a propósito. Fue muy difícil la situación, pero salimos adelante, que es lo principal».
A lo largo del operativo, se realizaron 31 viajes de ida y vuelta para abastecerse de agua y combatir el fuego. Sin embargo, no fue fácil contar con un equipo completo, ya que muchos de los voluntarios no pudieron participar debido a compromisos laborales. «Si bien esto es algo público, es difícil que te den permiso, pero hacemos lo que podemos», explicó Leguizamón, solicitando a la comunidad mayor comprensión y apoyo ante estas situaciones extremas.