Así lo expresó el Senador Provincial, Noel Breard, en HACETE CARGO este miércoles donde resaltó la importancia de construir un nuevo proyecto político de cara a 2023. Además, opinó sobre la figura de Valdés como generador de nuestras estructuras dentro de la política provincial. «Tenemos que decir que fue una película continuada. Hemos tenido construido el esfuerzo de ganar las elecciones. Una misma madre tiene partos diferentes, eso decimos con respecto a las tres elecciones. Hay que hacer una lectura y estamos trabajando intensamente. Felicité a Walter Chavez por salir por la puerta grande y eso es muy importante en política», dijo y agregó: «De las 15 localidades gobernadas por el Partido Justicialista, ECO recuperó 8. De 75 intendencias, tenemos 63 en Corrientes. En Saladas fue muy difícil y ganamos por 40 votos. Lo que demuestra esto es que el requisito principal es estar juntos. Creí que se nos podía complicar en Cruz de los Milagros, pero ganamos finalmente. Si no hay unidad, toca perder. En San Roque fuimos divididos al igual que en Esquina y perdimos. El gobierno provincial está muy robusto y tiene una mayoría grabada en Cámara de Senadores y Diputados, es decir, estamos para trabajar muy bien. La mayoría grabada ya tenemos hace bastante tiempo, así que ahora estamos siendo funcional al Estado de derechos, a los poderes y al gobierno. A veces el voto también entra por lo local y eso que son buena gente. Siempre hay que dejar una esperanza, una mayoría grabada es importante, así están bien las cosas».
A su vez, resaltó la desigualdad entre las provincias con respecto a su PBI y la mirada que tiene el gobernador Gustavo Valdés sobre la unificación de Corrientes y el reequilibrio por el cual trabaja. «Valdés tiene en claro que la política es acción local y visión global, esto implica que su responsabilidad está en Corrientes y su densidad política quiere aprovechar para ayudar a Corrientes y al país. Él habla de hacer un reequilibrio en el norte argentino. Hay cinco provincias que tienen el 80% del PBI y eso no es una Nación, es una Argentina desequilibrada. Estamos sin gas y eso sirve para el proceso de industrialización. Tenemos una diferencia de costo para trabajar. Argentina tiene que hacer un esfuerzo compartido y Valdés se está convirtiendo en un vocero del equilibrio. Valdés tiene una cosa que no se la cree, pero a nadie se le ocurra que el puede ser presidente; él será gobernador por cuatro años. Él tiene muy serio la responsabilidad de los cuatro años. Quiere reequilibrar a Corrientes y está desordenando el status quo que tenía el radicalismo en el cual cuatro o cinco resolvían las cosas, ahora más gente debe involucrarse y debatir; se genera un juego muy importante», comentó.
«Normalmente uno muestra más los valores en la derrota. No reconocer la derrota cuando los números no dan, tiene un término de psiquiatría importante. Tenemos que convertirnos en opositores de alternativa. Si estamos todo juntos y no sabemos qué hacer, nos juntamos para no saber qué hacer. Ahora debemos pensar cómo vamos a construir un proyecto para adelante y qué puntos tenemos que discutir con el gobierno para los dos años que quedan. El sindicalismo cuando hace las marchas cuida su privilegio. Hay cosas que discutir», indicó el funcionario sobre la planificación del proyecto político a nivel nacional.
Por otro lado, analizó la admisión de la derrota del presidente Alberto Fernández y dejó un mensaje esperanzador en el que el diálogo prima por sobre cualquier tinte político. «Fernández lo que hizo es un discurso para la militancia, creo que reconoció la derrota. Es bueno que un dirigente tenga voluntad de lucha. La democracia es diálogo porque donde perdimos el diálogo, comienza la guerra. El arreglo del FMI, que se debatirá en el Parlamento Argentino, debe debatirse lo antes posible porque o sino explotaremos», resaltó Bread.