Así lo manifestó la hermana de las víctimas de Manuel Sussini, Eugenia Dalcolmo, quien fue la denunciante de la causa tras poseer varias pruebas en contra del ex-funcionario provincial. Anoche en Punto de Vista, la mujer contó contundentemente los hechos y dejó una frase rebotando, haciendo alusión al trato que recibe el político con la prisión domiciliaria.
En el mes de Septiembre, Corrientes estuvo en convulsión por la denuncia a Manuel Sussini, ex- senador y diputado provincial, quien habría violado a dos jóvenes de la localidad de Santo Tomé durante la convivencia en su casa de la ciudad capitalina. Las jóvenes se habían trasladado a Corrientes para trabajar como empleadas domésticas a cambio de un futuro para la menor de ellas, que era «el sueño de cantar en el Teatro Vera». «Soy la hermana de las víctimas y soy la denunciante de la causa. Es una gran pesadilla por la que se encuentra pasando una familia normal. Es triste porque afectó a una persona que tenía el sueño de cantar tras abusar de su buena fe. Él le prometió que iría a cantar al Teatro Vera así que la emoción era tremenda», inició diciendo la hermana de las víctimas.
Ante la pregunta del periodista Mauro Villar, sobre la relación que mantenían con Sussini, la mujer dijo: «Fue una relación normal y de gente aparentemente normal hasta que se da toda esta situación de dos abusos. El hecho está demostrado porque las pericias contrastan las violaciones. Mis hermanas se encuentran bajo tratamiento psicológico».
Luego, Eugenia explicó algunos de los hechos ocurridos. «Mi hermana, la mayor, fue la que vino hasta mi domicilio cuando pudo escapar y me mostró las pruebas. La menor, salió como testigo en carácter de privación ilegítima de la libertad. En medio de la pericia por parte del cuerpo médico forense de la ciudad capitalina se entera de que había sido violada. A la menor le suministraron algún tipo de calmante durante ese tiempo porque como tenía dolor de muela, se ve que él le daba algún tipo de calmante; según relata ella, cuando iba a dormir lo hacía vestida y a la mañana siguiente se encontraba con dolores corporales, sin ropa y con la puerta abierta. Fue muy shockeante la pericia ginecológica, porque comprobaron que ella había sido violada con acceso carnal».
«Todo ahora está en manos de la justicia. Desearía que no existiera la protección política. Nosotros estamos luchando para que él no tenga prisión domiciliaria. Él es una persona común y debe ser tratado como un ciudadano normal. Si tuvo la capacidad para realizar esos actos atroces, también debería tener la capacidad de estar en la cárcel», finalizó contundente.