Un nuevo hecho de inseguridad volvió a alertar a los bellavistenses ya que el día lunes, una bioquímica de la ciudad ingresó a su lugar de trabajo a las 06:00 horas en el Policonsultorio «CURAR» ubicado por calle Santa Fe casi General Roca e inmediatamente se percató de que algunas puertas estaban violentadas, así como también una TV removida de su lugar habitual. Luego de observar la situación, notó que en su laboratorio faltaba la notebook que contenía los datos de sus pacientes y además una balanza. La Comisaría Primera actúo en el lugar y en las últimas horas avanzan en la investigación a pesar de no contar con cámaras de seguridad.
El propietario del policonsultorio, Dr. Ricardo Cura, se mostró indignado tras el hecho y apuntó a la inseguridad en la ciudad como un flagelo creciente. “Lamentablemente es una situación que se da con mucha frecuencia, nos estamos acostumbrando a estos actos de vandalismo. Prácticamente la que inicia con las actividades es la bioquímica Esperanza Lanzoni, ella dio cuenta que faltaba la tele de la sala, además de ver las puertas de su laboratorio y de otros dos consultorios más, violentadas. Ella de inmediato avisó, así también a la policía y se labró el acta correspondiente. No sé si la intención es buscar dinero, pero en este lugar no hay, solo se hace actividad médica”, remarcó.
En este sentido, manifestó que lo más valioso es la información de cada paciente, imposible de recuperar. “Rompieron cuatro puertas de aluminio y la única que fue perjudicada de manera directa fue la bioquímica, con una computadora y una balanza. La notebook en cuanto al valor uno lo puede recuperar, pero los datos de los pacientes, no. Es el trabajo y el archivo digital; es la preocupación mayor. Estamos viendo cómo nos protegemos un poco más porque molesta y mucho”, dijo.
“Seguramente domingo a la noche entraron y ayer en horario de la mañana, cuando la bioquímica se dirige a abrir su laboratorio, se encuentra con esta novedad. Estuvo trabajando la policía y las dos puertas de acceso no fueron violentadas. Si hay una obra conectada a un patio interno, que tiene una pérgola donde hay una separación de 20 centímetros; aparentemente una persona muy delgada pasó por ahí. A la tele la bajaron muy lentamente y evidentemente pasó algo que no la pudieron llevar. Si uno mira por donde entraron pareciera ser “el hombre de goma” porque es un espacio muy estrecho”, señaló el profesional.
Así también, explicó cómo podría haberse producido el hecho. “Ese patio comunica a una pieza depósito y eso comunica con los demás consultorios. Creería que fue más de una persona. El policonsultorio no cuenta con alarmas porque no funcionaba, todo esto ocasiona gastos, nos vamos encerrando cada vez más. Otra cosa son las cámaras, que no las tengo pero que tienen que ver con la seguridad. A esta situación yo la veo desbordada y uno se siente violentado porque ingresan en el lugar de trabajo”, comentó Cura.