Marisú Liwski, Secretaria General CODIUNNE, confirmó la adhesión a una nueva medida de fuerza en el marco de la profundización del plan de lucha que los gremios vienen realizando desde el inicio del semestre. La decisión surge ante la falta de una recomposición salarial adecuada que permita a los docentes universitarios alcanzar la canasta básica.
«No hay una recomposición salarial digna. El aumento propuesto es del 2% para agosto y del 3% para septiembre, lo cual es irrisorio porque el docente no llega a cubrir la canasta básica y la situación se vuelve insostenible. Queremos visibilizar este problema que afecta a la universidad pública. Sin salarios dignos, no hay universidad pública», afirmó Liwski.
La sindicalista subrayó la importancia de la universidad pública como espacio de construcción y desarrollo colectivo. «La universidad somos personas, estudiantes, docentes y no docentes que estamos en el día a día. El orgullo por la universidad pública es lo que nos impulsa a seguir adelante. Nuestra lucha es por la universidad pública, tanto para las próximas generaciones como para las actuales», destacó.
En cuanto a los próximos pasos, Liwsky adelantó la posibilidad de una nueva marcha en septiembre, dado que la propuesta del Gobierno Nacional no satisface las necesidades del sector. «Estamos evaluando cómo continuar, es probable que en septiembre organicemos una nueva movilización. Para el gobierno nacional, la educación pública no parece ser una prioridad. El paro actual es por 48 horas y, hasta ahora, es la única medida de fuerza a la que nos adherimos. Seguimos con la esperanza de que en algún momento el gobierno nos escuche», cerró.