«SOLO SON RUMORES». LA RESPUESTA DE LA EMPRESA QUE FABRICA LAS «MAQUINITAS» DE LA POLÉMICA

Algunos números de la empresa en el ojo de la tormenta: US$2400 millones de ventas el año pasado a nivel global, presencia en 50 países y 5000 «representantes de marca» o revendedoras en la Argentina, entre las que se encuentran famosas como Nicole Neumann y Marcela Kloosterboer. En los últimos días, la firma de cosmética Nu Skin se viralizó por denuncias en redes sociales.

La acusan de esquema piramidal y de reclutar vendedoras (que en un 80% son mujeres) que «deberían» comprar el producto para poder posicionarlo. La firma está activa desde 1984 y tiene su sede central en Utah, Estados Unidos. En la Argentina, emplea directamente a 60 personas, 5000 revendedores y 20.000 clientes, estiman sus representantes. Tiene oficinas en Puerto Madero y locales físicos en ese mismo barrio y en Rosario.

Quienes hicieron las acusaciones en las redes sostienen que la empresa opera bajo un modelo de negocios piramidal, algo que en el mundo de las finanzas se conoce como esquema de Ponzi: aquel que genera ganancias para los primeros inversores al atraer nuevos inversores y se agotan cuando deja de haber nuevos inversores disponibles y fondos suficientes.

Sus detractores se basan en acciones judiciales. Por ejemplo, en 2016 Nu Skin pagó US$47 millones en China para arreglar una demanda donde se los acusaba de operar bajo un esquema de este tipo y de hacer declaraciones engañosas sobre sus operaciones en el país, según la agencia Reuters.

La empresa, en cambio, asegura que opera bajo un esquema de marketing multinivel: cada vendedora gana una comisión por vender el producto, pero también por las ventas que generen las vendedoras que sumen a la red. Es decir, no gana comisiones directamente por la cantidad de personas que reclute.

Tres representantes de la compañía respondieron a las acusaciones. Ellos son Carlos Demarco, director de Operaciones para América Latina; Don Lovelace, vicepresidente de Ventas y Operaciones para América Latina y Karen Tamai Gomez, directora de Marketing para América Latina.

¿Cómo explicarían su modelo de negocios?

Carlos Demarco (CD): Nu Skin es una compañía que ha operado más de 35 años canal de venta directa. En este formato de negocio tenemos distribuidores independientes que comercializan y venden nuestros productos a los que quieren probarlos y ese es el negocio principal. La empresa paga comisiones a estos distribuidores independientes únicamente por la venta de productos y no lo hace por reclutar ni por otro tipo de actividad. No requerimos que los vendedores hagan ningún pago de cuota ni es necesario que compren productos para volverse distribuidores.

Están explicando que las vendedoras solo comisionan por los productos, pero eso sería una venta directa plana, no multinivel.

Don Lovelace (DL): No. Ganan por las ventas personales que hacen, pero también por las ventas de personas en su red. Por eso es multinivel. Todo se basa, no en reclutar personas, sino en las ventas que hacen sus equipos.

Si alguien quiere comenzar a vender, ¿cómo sería el paso a paso?

DL: Se inscriben sin costo. Suelen recibir una invitación de otro distribuidor que ya trabaja como vendedora. Algo importante es que no pedimos que ellos compren para revender, sino que muchas vendedoras lo compran para el uso personal. A las personas a las que ellos les venden el producto, les facilitan el pedido desde la compañía, pero no manejan un inventario de varios productos. Para ser distribuidora técnicamente no haría falta comprar tu propia máquina.

FUENTE: DIARIO «LA NACIÓN».

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