El cantante Santiago “Chano” Moreno Charpentier fue internado de urgencia en el sanatorio Otamendi donde fue operado a causa de una herida de bala que le infringió un policía al que quiso apuñalar durante un violento episodio, cuando se negaba a recibir asistencia médica por un brote psicótico. El debate conceptual se estableció en las redes y para ello, la médica psiquiatra del Centro «Cuidarte», Susana Escobar, habló en LA MAÑANA DE LA RADIO sobre las causas y la influencia de estupefacientes en las patologías. «Un brote psicótico es un cuadro que se presenta cuando hay alteraciones de neurotransmisores que se producen cuando hay una pérdida de juicio de la realidad. En ese momento, la persona puede entender que está en peligro. Generalmente se da en pacientes con esquizofrenia. Siempre que hay consumo de sustancias, hay alteraciones en los neurotransmisores. Uno se puede poner muy contento o muy enojado y comienza a hacer cosas», explicó.
«Esto puede ocurrir a causa de la deshidratación. Esto en este tipo de personas que consumen estas sustancias, se instala como un cuadro común. En este tipo de diagnósticos, es normal que el cerebro esté enfermo y no puede limitarse. Quienes rodean a estas personas, deben estar atentos a signos para que se pueda actuar antes, porque es muy común que los que consumen marihuana o cocaína, sientan una «persecución». Esta situación es más frecuente y fuerte de lo que la gente se imagina», indicó.
DIFERENCIA ENTRE ALUCINACIÓN Y BROTE PSICÓTICO
Al ser consultada sobre la diferencia entre alucinación y brote psicótico, Escobar sostuvo que son del mismo carácter. «Los dos son brotes psicóticos. Se produce cuando se siente la pérdida de la realidad. Puede o no haber agresividad. Nosotros tratamos de contener a las personas, no contradiciendo. Se pueden llegar a diferentes negociaciones que permitan que el paciente se sienta seguro», dijo ante la similitud de estas eventualidades.
PATOLOGÍA DUAL
La patología dual se refiere al hecho de que una persona sufra dos patologías, una de ellas una adicción y la otra un trastorno. Pueden ser adicciones a sustancias legales como el tabaco o el alcohol, a sustancias ilegales como las drogas; incluso a ciertos comportamientos como el adicto a las compras o al sexo. Por otro lado, los trastornos también pueden ser de distintas tipologías como esquizofrenia, hiperactividad o trastornes bipolares. «Cada vez que uno consume es una ruleta rusa, no se sabe con certeza cómo va a reaccionar el individuo o si tendrá un brote psicótico. Lo que si, cuando uno ingresa al brote, ya no sale más», finalizó.