Este domingo, la imagen de la Virgen del Carmen, patrona de Bella Vista, volvió a ser expuesta en la misa de la noche tras haber atravesado un extenso proceso de restauración en Sáenz Peña, Chaco, desde mayo de 2024. Cientos de fieles se acercaron al templo para venerarla y participar de este momento histórico para la comunidad.
Un regreso cargado de emoción y fe
El cura párroco Gregorio Valenzuela destacó la importancia del retorno de la Virgen: «Volvió mamá María a su pueblo y es un hecho histórico. Cuando mamá está ausente, sentimos miedo y oscuridad, pero cuando la vimos de nuevo, sentimos alegría al reencontrarnos con ella».
Además, vinculó este acontecimiento con el Bicentenario de Bella Vista: «En la Iglesia estamos viviendo un año jubilar y en Bella Vista, los 200 años. No podemos estar ajenos a esta celebración porque la Iglesia siempre estuvo en el inicio de los pueblos, así que tenemos varios proyectos. Cada vez que la patrona o el patrón sale a recorrer los parajes, es una gran bendición, así que estaremos acompañándola», agregó.
Un trabajo de restauración minucioso
El licenciado en Historia, Juan Carlos Denegri, explicó que la imagen nunca había sido sometida a una restauración tan profunda: «Siempre se hicieron arreglos superficiales, pero esta vez se trabajó con mucha prolijidad. Fue un trabajo meticuloso, por lo que ahora la tenemos nuevamente en el templo y la podremos conservar por muchos años más en Bella Vista».
Denegri también recordó la historia de la imagen y su relación con la fundación de la ciudad: «La Virgen tiene más años que el pueblo, incluso más que la fundación de nuestra ciudad. Cuando Ferré llegó, mandó a buscar una imagen para nuestro templo».
Nuevos proyectos para la Virgen
La devoción por la Virgen del Carmen sigue impulsando iniciativas en la comunidad. Denegri adelantó que se está diseñando un carrito especial para facilitar su traslado en procesiones: «Vamos a hacer un pequeño carrito para transportarla y que la gente pueda empujarla con mayor comodidad».
El carpintero José Insaurralde, encargado de la confección, detalló el proceso artesanal: «Esta es una idea que nació desde la comisión de la Parroquia. El carrito permitirá sacar la imagen en procesión. En ningún momento tuvimos un plano, sino que la idea está en el aire, es completamente artesanal. Está hecho en madera de ciprés».
Por otra parte, el diseñador Marcelo Péndola trabaja en una nueva corona para la Virgen, que será un símbolo renovado de la fe de los fieles.